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Miércoles, 14 Julio 2010 06:03

Especiales de Culturaencadena.com: Crónicas Del Sonisphere Festival 2010 de Getafe

Escrito por  Publicado en Crónicas de conciertos 2023-2024
Faith No More

Image by F de Falso via Flickr

1-. Contracrónica del Festival Sonisphere 2010

A esas alturas ya sabemos que los festivales o en su defecto las concentraciones masivas en cualquier campo, suelen dejar bastante que desear. En el caso que nos atiende ya hay una serie de condiciones que de antemano conocemos de sobras; un festival de música ante todo se plantea como un negocio potencial que tiene que generar grandes beneficios y el colectivo heavy es un blanco perfecto para ese tipo de eventos, es un sector siempre muy fácil de dejarse seducir con tan solo un cartel suficientemente atrayente de grupos que sean de su agrado y una vez allí dentro ya le da igual todo, la adaptación al medio para sobrevivir ya es algo que forma parte de la condición humana por naturaleza.

La organización ya parte de directamente de ese hecho, por lo que pedir condiciones de precio razonables en la comida o en la bebida, en el merchandising, en el trato al público asistente, en los lavabos, en el sonido o en la propia zona de acampada es una batalla perdida y lo más óptimo es aprovecharse de ello y al personal que le den. Mi recien experiencia en el Finisterrae Festival me había hecho olvidar un poco esa sensación, pero aquello fue un festival de luxe, algo excepcional hoy en dia, allí el organizador ya sabía que perdedería dinero y esa no era su principal preocupación, algo tan poco habitual hoy en dia como el simple amor por la música era lo que se respiraba mayormente en aquel ambiente, tanto en el trato a los grupos como al público.


::.. sonisphere ..::

Image by aemde via Flickr

Supongo que son las ventajas de un festival minoritario y con poca repercusión mediática, aunque los precios allí fueran también desorbitadamente caros. Las tres principales críticas que achacaría al Sonisphere Festival en ese sentido son el espacio donde se ubicó, una cutre extensión de terreno habilitada al mínimo para la ocasión, donde no habían espacios para cobijarse a la sombra y donde cada movimiento de cualquier persona suponía el levantamiento masivo de polvo. De hecho la imagen de un montón de gente tapada con mascarillas, prendas u otros artilugios daba fe de ello; simplemente al que por su PCH le resultaba especialmente molesto y desagradable no podía ya desprenderse de dicha protección durante casi todo el festival.

La segunda crítica residiría en el hecho de que en aquel macroconcierto se terminase el agua antes que cualquier otra bebida, así pues el segundo dia a partir de las 10 de la noche  más o menos ya resultaba imposible hacerse con un botellón de agua. Supongo que eso es debido a que todavía se sigue pensando con la mentalidad aquella de que en ese tipo de concentraciones el público y más el sector heavy por su inmerecida mala reputación sólo va a emborracharse y claro, hay que evitar que se acabe la cerveza a toda costa (supongo que en el FIB pasaría lo contrario), siendo el agua una bebida irrelevante para un sitio donde no hay más que sol y polvo asfixiando desde las tres y pico de la tarde.


::.. sonisphere ..::

Image by aemde via Flickr

El tercer punto que pondría sobre la mesa es más que nada una especie de petición, pues es algo que me cuesta entender y que ocurre en casi todos los festivales donde hay un tour de force musical maratoniano que dura casi 12 horas; ya que los espacios donde se ubican esos eventos suelen estar alejados de la civilización y desprotegidos de las condiciones climáticas adversas (sol, lluvia, viento,...) y además suelen celebrarse en verano; porqué no empezar más tarde, por ejemplo a las 18 horas, y alargarlo de cara a la noche, más sabiendo que cuando termina muchas veces se sigue pinchando música porqué el personal asistente aun está en la primera fase nocturna y es incapaz de irse a dormir, o por lo menos que reduzcan el cartel de grupos si no se pueden alargar los horarios por permisos o porqué los mismos grupos se niegan a actuar a partir de ciertas horas de la madrugada.


::.. sonisphere ..::

Image by aemde via Flickr

Aquí los perjudicados son los mismos grupos, ya que mucha gente como en mi caso prefieren acercarse más tarde al recinto cuando el calor es algo más soportable, y los grupos que tocan al principio del cartel a parte de tener que tocar en pleno dia y a plena luz del sol, reciben mucha menos afluencia del público, cosa un tanto injusta o con poco sentido desde el punto de vista de los mismos artistas que en teoría quieren darse a conocer, a pesar de que cobren igualmente. Por lo demás decir que fue muy disfrutable, todo y que pueda parecer lo contrario leyendo hasta ese punto y de buenas a primeras mi contracrónica. Del tema público prefiero no opinar ni para bien ni para mal, es lo que te encuentras y punto, basta decir que para mi la mayor parte de él no fue un público especialmente molesto en casi ninguna ocasión.

Entiendo que montar cosas de tanta envergadura no tiene que ser nada fácil, debes tener en cuenta muchísimos factores y además el mundo no te lo va a poner nada fácil, ya que si por el mero hecho de hacer cosas banales ya tienes que hacer muchos trámites o dar mas pasos de los que realmente serían necesarios, no quiero imaginarme lo que conlleva llevar a cabo cualquier festival. Como parte positiva destacaría que el hecho de que hubieran dos escenarios hizo que la espera entre conciertos fuera nula o mucho más rápida que empleando tan sólo un escenario, algo que se agradece. A pesar de no haber casi ninguna indicación en todo Getafe, acceder a la zona donde tenía lugar el festival tampoco tenía mucha complicación y al menos si te permitía aparcar relativamente cerca y no andar más de 10-15 minutos hasta entrar al recinto.


2-. Crónica musical

Show schedule of the Sonisphere Festival in Ki...

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En cuanto a lo musical no voy hacer una crónica exhaustiva de cada actuación (tampoco pude ni quise verlas todas, fuera por falta de tiempo o exceso de temperatura); sólo me voy a centrar en lo que me transmitió el concierto de cada uno de los grupos que vi. La conclusión que extraje en general a raiz de las bandas programadas para el Sonisphere Festival es que el panorama musical actual está un tanto maltrecho y ello es un hecho preocupante, grave, a la vez que contradictorio. El rock está ya al alcance de todos, escuchar y aprender música es mucho más accesible para el que quiere y requiere mucho menos esfuerzo que antaño gracias sobretodo a las nuevas tecnologías; y además coincide en que éste es totalmente corporativo y es otra herramienta más del sistema.


Saxon performing at Sonisphere Festival in Kir...

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El resultado es que tenemos un panorama muy saturado de grupos y músicos (tanto nuevos como viejos), pero con pocas bandas que realmente aporten algo nuevo o fresco; ¿debe ser por qué el rock no da para tanto o en realidad ya no da para mucho más? ¿o simplemente por qué los nuevos intereses de los músicos han cambiado quizás su poder como fuente creativa y la excesiva masificación lo ha desviado del que era su epicentro debilitándolo en gran parte?. Todo se ha multiplicado por mil pero siempre hay que recurrir a las viejas glorias como reclamo para llenar de manera segura los festivales. Y digo eso porqué grupos como Annihilator, Saxon, WASP, Slayer, Megadeth, Suicidal Tendencies, Alice In Chains o Faith No More hace muchos años que crearon las obras por las que han sido reconocidos en su momento o posteriormente.

Entiendo que a pesar de ser mejores músicos y seguir publicando discos todavía muy dignos, todos ellos ya no aportan gran cosa con sus nuevas creaciones artísticas y su directo sobrevive gracias a los clásicos pertenecientes a su época dorada, que son los que predominan en el setlist y los que realmente quiere oir la gente, tanto los viejos seguidores como los nuevos que se han ido incorporado por el efecto mitificación, que se encarga de reforzar el legado de cualquier banda con el paso de los años y más cuando está se ha separado sin ningún indicio aparente de reunificación, incluso aquellas que en su momento realmente no destacaron mucho o no fueron muy bien vistas el paso del tiempo suele favorecerlas en la mayoría de casos, porqué sino fuera por ello y nos centráramos en su trayectoria actual otro gallo cantaría y el interés que despertarían no sería ni la sombra de lo que es.


Porcupine-Tree1

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En cuanto a las actuaciones del viernes dia 9 yo llegué cuando por desgracia ya estaban tocando sus últimos temas el grupo progresivo Porcupine Tree. El grupo liderado por Steven Wilson es de los pocos que aportan su granito de arena para renovar el rock con su propuesta musical, que además huye del cliché virtuosismo tan trillado por todos los grupos que se hacen llamar progresivos, sin embargo ellos sorprendentemente consiguen ser más progresivos que la mayoría de sus coetáneos. El sonido era más que decente y lo poco que vi de su actualización me pareció muy convincente en todos los sentidos. Porcupine Tree prefieren recrearse en los ambientes mas que cargar una canción con mil cambios y mil notas y la base rítmica sustenta muy bien cada uno de sus temas. Una música que juega muy bien con las dinámicas y que además si te dejas arrastrar por ella fluye y te envuelve.

No creo que fueran el grupo más esperado ni el más indicado para tocar en un festival de esas características en pleno atardecer, pero en ese sentido hay que reconocer a favor del festival que al menos intentaron que todas las facetas del metal tuvieran un mínimo de representación y ello se agradece. WASP fueron los siguientes en salir y durante toda su actuación se mostraron en plena forma, la respuesta del público también fue buena. Blackie Lawless era el único miembro que quedaba de todas las formaciones que tuvo el grupo en los años 80, la que fue su época de gloria, pero el resto de la banda cumplió muy bien su papel encima de las tablas, cada uno sabía bien lo que debía hacer y en conjunto resultaron una banda enérgica con su hard rock metalero muy apto para un entorno como aquel.

Blackie Lawless. Wasp. The Waterfront, Norwich...

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Blackie Lawless como muchos otros iconos supervivientes de décadas anteriores no creo que siga sólo por una cuestión de dinero, sinó más bien porque prefiere seguir disfrutando haciendo aquello que le gusta, que además es por lo que se le reconoce y por lo que va a seguir recibiendo ovaciones, muy beneficiosas para la autoestima de casi cualquiera. Yo entiendo perfectamente que muchos de esos grupos, a pesar de que su momento musical haya pasado hace años y jamás vuelvan a aportar nada imprescindible, sigan en activo; siempre han hecho eso y no les queda otra, hay que montárselo como sea y antes que hacer cualquier otro tipo de trabajo siempre será mejor seguir grabando y girando, incluso en el caso de que no necesitaran el dinero alguien con inquietudes tampoco puede estar todo el dia perdiendo el tiempo sin hacer nada de provecho, bastante aburrida es la vida por si sola.

No importa que disco hayan publicado WASP y ni si es mejor o peor, solo cuenta que toquen sus clásicos, es una fórmula infalible y asi lo hicieron, no faltaron temas que ya se han convertido en himnos como "On your knees", "L.O.V.E. Machine", "I wanna be somebody", "Wild child", "I don't need no doctor", "The real me" (versión de los Who), "Hellion", "Scream until you like it" o "Chainsaw Charlie", algunas veces en forma de pupurrí y otras como piezas íntegras, más algún tema del último disco por motivos estrictamente promocionales. Lo que está claro que visto como están las cosas, a mi en ningún momento me molestará que viejas glorias del pasado sigan funcionando, aunque sea tocando lo mismo de siempre, mientras sean capaces al menos de realizar un buen show en directo y WASP cumplieron con su cometido.


Slayer-art

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En cambio Slayer no me acabaron de convencer, si bien nunca han sido para mi un grupo de cabezera les respeto por su labor e influencia dentro del metal más extremo, los vi hace muchos años con Sepultura de teloneros y me parecieron mucho mejores. Y de hecho todavía puedo disfrutar mucho con algunos de sus álbumes de estudio, eso es algo innegable y que no cambiará; pero a raiz de su actuación en el Sonisphere los vi como un grupo bastante pobre en cuanto a recursos, muy repetitivo y totalmente deudor de una fórmula que hoy en dia ya está agotada. El sonido de las guitarras no me gustó, sonaba demasiado a medios y los solos de Jeff Hanneman y Kerry King me parecieron de risa, una y otra vez repitiendo los mismos patrones sin nada de feeling y melodía, e incluso por momentos me parecían fuera de tono; actualmente ya no basta con palancazos sin sentido, mecanismos rutinarios y tappings con púa que provocan verguenza ajena.

Hay grupos que prescinden totalmente de los solos de guitarra o los minimizan al máximo y no pasa nada, no son ninguna obligación y hacerlos debe tener otro sentido que no sea sólo el de rellenar un espacio a determinar. Además a la música de Slayer tampoco le hace falta precisamente un solo de guitarra por canción para mantener su característico sonido lleno de velocidad, agresividad y contundencia; pues su esencia tal y como dijo despues Mike Patton reside en su atleticismo. El bajo de Tom Araya apenas se entendía y ni tan solo Dave Lombardo, un renombrado batería que siempre ha gozado de muy buena reputación en el circuito metalero, me pareció nada del otro mundo. En fin, no faltaron temas como "Dead skin mask" o "Mandatory suicide" pero a mi me resultó bastante monótono en general.


Faith No More

Image by F de Falso via Flickr

Con Faith No More no tenía las expectativas muy altas, Mike Patton es un tipo imprevisible y además cuando se separaron hace bastantes años no se respiraba nada de buen rollo entre los miembros del grupo. Sin embargo eran una de las razones que me decidieron firmemente a asistir al festival junto con Heaven And Hell (que al final por el motivo evidente que ya sabemos acabaron no actuando). Era seguramente la única oportunidad para verlos y aunque no fuera una apuesta nada segura, era demasiado irresistible como para dejarla escapar. Han sido uno de mis grupos favoritos desde siempre y poder escuchar todas esas canciones en directo una vez en la vida era algo que a esas alturas ya ni soñaba. Mis miedos quedaron desvanecidos al momento, el sonido con ellos mejoró muchísimo y la banda además salió pletórica y en plena forma.

Mike Patton con su aire provocador empezó a hablar durante todo el concierto en español, diciendo muchas chorradas, aunque nunca veias claro el propósito del frontman, no sabías si se estaba riendo del público o si no se enteraba de nada a raiz de algunos de sus comentarios y sólo quería dar la nota; el teclista Roddy Bottum le seguía el juego e incluso Patton se atrevió a cantar "Evidence" totalmente en español con una traducción un tanto discutible. Una banda muy profesional, versátil, muy bien compactada, que desprendió y transmitió en todo momento mucha energía. La banda no duda en introducir pequeños arreglos nuevos a sus canciones y Patton las canta variando algunos de los registros y melodías con respecto a las versiones grabadas. Por su batidora iban pasando todos los ingredientes y estilos característicos del grupo con total naturalidad dando lugar a un show musicalmente muy variado.

El repertorio que interpretó la banda para esta ocasión repasó temas de toda su carrera, aunque fue "Angel Dust" el disco del que creo que sonaron más temas. No faltaron "We care a lot", "From out of nowhere", "Land Of Sunshine", "Caffeine", la thrashera "Surprise you're dead", "Easy" (versión de los Commodores), "Be agressive", "Evidence" o "The gentle art of making enemies". Para mi una actuación soberbia que ya justificó por si sola mi presencia al festival.


SUICIDAL TENDENCIES ( punk hardcore ) Mike Muir 32

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Y para cerrar la primera noche estuvieron Suicidal Tendencies capitaneados por el incansable Mike Muir, que con un repertorio a medio camino entre el hardcore, el thrash y pequeñas incursiones en otros estilos nos ofrecieron otro buen show repleto de fuerza y rabia contra el sistema, además con muy buen sonido también y desprendiendo ante todo una actitud muy combativa.

Destacaría por encima de todo al bajista y al batería que lleva la banda actualmente por el dominio asombroso que muestra cada uno con su respectivo instrumento, dejando de lado su virtuosismo hay que reconocer que lo más importante es que ambos tienen un tempo muy firme y un groove extraordinario sobre el que el resto de la banda puede moverse muy bien a sus anchas. Mike Muir con su típico look no paró de moverse ni un instante de la manera habitual en él, animando al personal que ya nos ibamos quedando sin fuerzas. Sonaron sus clásicos "Possessed to skate", "War inside my head", "Send me your money" o "I saw your mommy" entre otros. El sabado dia 10 llegamos justo a punto pde que empezara la actuación de los neoyorquinos Coheed And Cambria, una banda relativamente joven que practica una especie de mezcla entre rock alternativo, rock progresivo y hard rock setentero.

Me había bajado un disco de ellos pero la verdad es que no me dio tiempo a escucharlo, por lo que desconocía bastante su propuesta, así que su concierto del Sonisphere fue mi primera toma de contacto real con esta banda y la experiencia fue positiva; una banda cohesionada y contundente con un cantante cuya voz me recordaba bastante a la de Geddy Lee de los canadienses Rush. A veces su música también me recordaba a Wolfmother pero en versión mejorada, supongo que por ese sonido setentero. Luego les tocó el turno a los numetaleros Deftones, que con el sol todavía acechando a la banda en plena cara ofrecieron un concierto también muy potente, no cabe duda que se entregaron y se esforzaron, pero el sonido dejó bastante que desear, al menos desde el ángulo en el que estábamos.

Max Cavalera in a gig in 2008.

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Soulfly eran el siguiente grupo del cartel en aparecer en escena; a mi es una banda que particularmente no me dice nada, mucho ruido y pocas nueces como se suele decir; cuyo único aliciente reside en que están comandados por Max Cavalera, antiguo líder de Sepultura. Me pareció entender por la presentación de Max que el batería que llevaba la banda era Igor cavalera Jr, supongo que debe tratarse del hijo de su hermano, el batería Igor Cavalera, también ex-componente de Sepultura. Un cóctel musical un tanto infumable que pretende ser una alternativa numetalizada y modernizada de Sepultura, pero que sin duda le faltan temas memorables o con gancho. Soulfly como Sepultura también incorporan en sus canciones raíces musicales con carácter tribal y percusivo procedentes de su pais natal, pero para mi gusto el resultado igualmente es bastante flojo y notoriamente inferior incluso a los últimos discos que han publicado Sepultura.


Alice In Chains

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La música oscura con carácter depresivo de Alice In Chains quizás no sea la más adecuada para escuchar en un entorno como el de un festival veraniego, y más todavía a plena luz del dia; sin embargo su actuación estuvo francamente bien y obtuvo una buena respuesta del público, a pesar de que el sonido tampoco fue todo lo bueno que hubiéramos querido. Pudimos ver a su nuevo frontman William DuVall desenvolviéndose muy bien con el grupo, tanto en los temas antiguos como en los de su último disco. Como FNM también hicieron un amplio repaso a toda su discografía incluyendo en la recta final del concierto clásicos memorables de la talla "Man in the box" o "Rooster". Sus nuevos temas realmente ya no aportan mucho a su legado, pero mantienen un mínimo de calidad. Sus característicos juegos de voces tampoco se resintieron en directo, sonando muy similares a como los hacían cuando el fallecido Layne Staley estaba en la banda.

La banda se mostró bien engrasada; además la ocasión de poder ver a Jerry Cantrell, Mike Inez y Sean Kinney juntos de nuevo y en un buen estado de forma ya mereció totalmente la pena. A Megadeth se les veía algo cansados, especialmente a Dave Mustaine se le notaba con poca voz, y si en condiciones normales ya es un cantante limitado con pocos recursos, aquí acusó notablemente esa deficiencia vocal. El sonido tampoco fue gran cosa, la música sonaba bastante floja supongo para que la voz de Mustaine se escuchara mejor y el no tuviera que forzar tanto sus cuerdas vocales, pero esto le restó contundencia al show. Se limitaron a cumplir el expediente mostrando muy poca complicidad con el público que fue perdiendo interés paulativamente, y eso que ellos creo que eran uno de los grupos más esperados por el sector metalero a juzgar por la gran cantidad de camisetas que se podían ver de la banda entre los asistentes.


Logo of Megadeth

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Un repertorio compuesto por temas míticos como "Wake up dead", "In my darkest hour", "Symphony of destruction", "A tout le monde", "Holy wars", "The mechanix" o "Peace sells but who's buying" fue basicamente lo que salvó la actuación un tanto deslucida de Megadeth; sin embargo los nuevos miembros del grupo si parecen encajar perfectamente e incluso Chris Broderick tocó los complicados solos de Marty Friedman de manera bastante fideligna, sin duda el ex-Jag Panzer es un buen hacha. Ahora tocaba el turno para el que sin duda era uno de los platos más fuertes del festival; me refiero a los alemanes Rammstein. Ellos, junto con Porcupine Tree y Meshuggah eran uno de los pocos grupos de todos los que participaron en el festival en los que su época de mayor apogeo casi coincidía más o menos con el momento actual.


Rammstein

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Yo que en principio soy un poco reacio a los grupos que basan su show practicamente en el espectáculo y más cuando esto sirve para enmascarar ciertas deficiencias musicales quedé gratamente sorprendido con la actuación de la banda alemana. No escatimaron ningún tipo de efecto visual de los que normalmente emplean, algo que en el marco de un festival hubiera sido comprensible, y además también sonaron muy bien; un ejemplo de grupo que no tiene que recurrir a los solos de guitarra, pues lo más parecido a eso que escuché durante su concierto creo que no podría considerarse ni como tal. Su espectáculo medido hasta el último detalle en cada una de las canciones de su setlist actuó en perfecta simbiosis con la música del sexteto.

This is the song Rammstein.

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Esa combinación de guitarras rítmicas cortadas, teclados con aires electrónico-góticos y voz grave cantando en alemán les otorga sin duda un sonido muy personal, contundente y bailable. Sería inútil comentar todos y cada uno de los números escénicos y efectos que iba introduciendo el grupo en cada tema. Ante todo presenciamos un espectáculo muy cohesionado de una banda con muchas tablas que sorprendentemente consigue arrastrar a gente muy variopinta, aunque corren el riesgo de repetir excesivamente esa fórmula musical descrita anteriormente de momento la banda no se resiente de ello y resulta una experiencia recomendable verlos en concierto. Tras la actuación de Rammstein mucha gente empezó ya a largarse del recinto.

Era evidente que mucha gente había venido por Rammstein, pero además el cansancio ya hacia estragos y la última opción musical que nos presentaba el festival no era precisamente el mejor antidoto para ello. Meshuggah son una banda sueca relativamente desconocida pero muy admirada en el circuito underground y profesional que ya han marcado una tendencia para muchos otros grupos extremos. Llevan ya bastantes años funcionando y han publicado numerosos discos. Su música parte del death metal con toques progresivos de grupos como Atheist, Cynic o Death pero radicalizado a la máxima potencia en el aspecto técnico y modernizado a los tiempos que corren. A mi me impresiona sobretodo como pueden tocar unos temas con esos ritmos imposibles de seguir o comprender y hacerlo como la cosa más natural del mundo.

Swedish band Meshuggah performing on a live sh...

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Es un grupo que necesita que le dediquemos un tiempo y requiere un esfuerzo especial por parte del oyente para entender un poco de que va su propuesta, no debemos dejarlo pasar por alto a las primeras de cambio y quedarnos tan anchos pensando que es puro ruido, ya que si somos capaces de discernir su aparente brutalidad y oir lo que hay en realidad debajo de ella, podremos apreciar una música extremadamente complicada que solo parecen entender la propia banda y unos cuantos privilegiados más entre los que yo no me encuentro. El sonido también fue lo suficientemente bueno, porque de otra manera todo el trabajo que hay metido en cada uno de sus temas directamente se hubiera ido al garete porqué habría resultado ininteligible. Meshuggah fueron impecables en directo y lo que quedaba de público que aun era considerable aguantó bien el último coletazo; y hasta aquí esto fue todo lo que pudimos ver del Sonisphere Festival 2010.